Rompiendo el Tapón del Patriarcado: hacia la Cotidianeidad Femenina en la Narrativa de Peri Rossi
Thalia Armijos / Lesly Montaño / Henry Namicela
La obra Desastres íntimos es un libro de cuentos publicado en 2021 que explora temáticas relacionadas con la condición de la mujer en el contexto contemporáneo, la sexualidad, la violencia y la identidad. El tercer cuento de esta compilación, que lleva el mismo nombre, narra la vivencia de Patricia Suárez, una mujer de 33 años, licenciada en ciencias empresariales, que trabaja en una compañía de importaciones, pero también es una madre soltera que vive sola con su hijo de 2 años. El conflicto del cuento, es un contratiempo en apariencia ridículo: la protagonista no puede abrir un “simple” tapón de lejía. Sin embargo, este hecho mínimo produce algo más, por un lado su rutina se ve interrumpida y por otro, el tapón destapa una serie de reflexiones sobre la situación de las madres en el ámbito profesional, así como las relaciones de género vigentes en la sociedad contemporánea. En la parte cúlmine del relato, Patricia destapa la botella de lejía, revelando su autonomía como mujer. En este sentido, Peri Rossi a través del discurso del personaje permite cuestionar los estereotipos de género impuestos por una sociedad que, desde su perspectiva, parece estar hecha por y para hombres.
De esta manera, la autora nos invita a polemizar sobre la forma en que las estructuras patriarcales persisten de manera insidiosa, afectando la autonomía de las mujeres. Por lo que se abordará el tema de la cotidianeidad de la mujer como madre y trabajadora, seguido de la presencia de la figura masculina en la realidad de la protagonista, para finalmente tratar la toma de conciencia y despatriarcalización del personaje femenino. Temas que nos servirán como vehículo para cuestionar el papel de la mujer en la sociedad y la crítica hacia el patriarcado.
Con el fin de establecer una nueva perspectiva en torno a la feminidad, Cristina Peri Rossi resalta la cotidianeidad de su protagonista, Patricia, una mujer, madre soltera y trabajadora de oficina a quien todos estos roles le obligan a realizar sus tareas con rigurosidad y sin contratiempos; sin embargo, un tapón de lejía hace que su rutina se aplace. Así pues, “la botella de lejía no se abrió. Patricia se sintió frustrada y, luego, irritada” (Peri Rossi, 2021, p.22), esto hace que la protagonista se desprenda de su zona de confort por un simple tapón que desestabiliza sus tareas diarias. En este sentido, el problema de su angustia radica en el tiempo limitado que tiene para realizar sus responsabilidades como madre y trabajadora, pues como lo describe la narradora:
Eran las siete menos cuarto de la mañana; tenía que darle el biberón a su hijo, vestirlo, colocar sus juguetes y pañales en el bolso, bajar al garaje, encender el auto y apresurarse para llegar a la guardería, antes de que las calles estuvieran atascadas y se le hiciera tarde para el trabajo (Peri Rossi, 2021, p.22).
La caracterización de Patricia en el cuento como sostén y cuidadora de una familia monoparental, pone en evidencia la sobreexigencia y necesidad de control del personaje. Esto dado que las reflexiones del personaje así como las descripciones de la voz narrativa apuntan a la constante preocupación por el tiempo y por cumplir tanto con las tareas domésticas como con los estándares profesionales que no consideran al cuidado como un factor relevante, tal como menciona Franco (2010):
La sobrecarga es una característica de la madre soltera, ella debe asumir funciones domésticas, educativas, económicas, etc., funciones que no tiene con quien compartir por lo que ocupan casi todo su tiempo libre, trayendo como consecuencia que la madre tenga el tiempo justo y no disponga de un momento para su vida personal y social. (p.25)
Peri Rossi explora el entorno de este tipo de familias en la sociedad contemporánea, puesto que, al ser proveedora del hogar, la protagonista debe mantener una rigidez absoluta para "no tener fallos". Es así que en la narrativa de esta autora se resaltan los roles que hoy en día debe cumplir una madre soltera: estar a disposición de su hijo, del hogar y del trabajo, pues "a la empresa no le interesaban los problemas domésticos que pudiera tener" (Peri Rossi, 2021, p. 23). Entonces, el incidente con el tapón cobra un significado mayor, pues es el que produce los fallos. Además, al señalar esto, Patricia elabora una serie de reflexiones de su propia vida que ilustran cómo opera el sistema patriarcal en la actualidad y la forma en que afecta a las familias monoparentales.
En “Desastres íntimos”, los pensamientos, recuerdos, situaciones y anticipaciones de la protagonista evidencian la presencia insidiosa de la figura masculina. Así, a partir del incidente con el tapón, la voz narrativa expone el nivel de conciencia de Patricia sobre el rol de indefensión que se vería obligada a asumir si pide ayuda a su vecino para abrir la botella. La protagonista se imagina tocando la puerta de su vecino para que saliera a “rescatarla” a lo que él diría:
“Solo se necesitaba un poco de fuerza” o “Llámame cada vez que tenga un problema”: una frase ambigua y autocomplaciente, que reforzará su superioridad masculina. Ella lo aceptaría con humildad, porque era demasiado tarde… Patricia tuvo la sensación de que la dificultad en ausencia de un hombre era una confusa mezcla de enchufes rotos, puertas encalladas, reparaciones domésticas, miedo nocturno, soledad e impotencia. (Peri Rossi, 2000, p.25)
La imagen del hombre se representa a través de diálogos que aluden a su vigor y seguridad frente a la delicadeza e impotencia de Patricia. La cita también hace énfasis en todo un mundo que pareciera incomprensible para la protagonista, un mundo que corresponde al orden de lo máculino y que se relaciona con las reparaciones domésticas y las herramientas necesarias para llevarlas a cabo. En tal sentido, se problematiza la idea de “ir al rescate de la mujer”, pues esta aparente ayuda plantea la idea de una “masculinidad noble” basada en la sobreprotección masculina y la incapacitación femenina. Sobre ello Bourdieu (1996) menciona:
Se entiende, dentro de esta lógica, que la misma protección «caballeresca», además de que puede llevar a su confinamiento o servir para justificar, puede contribuir también a mantener a las mujeres al margen de cualquier contacto con todos los aspectos del mundo real «para los cuales no están hechas» (p.47)
Patricia anticipaba que aceptar la ayuda de su vecino podría llevarlo a adoptar un papel de caballerosidad que la haría sentir infantilizada. Por lo que decide no solicitar ayuda para evitar esta situación.
A partir de aquí Patricia revela una toma de conciencia al recordar cómo ha tenido que lidiar con este tipo de conflictos dentro de su hogar y entre sollozos la protagonista confiesa a su hijo:
—No creas que estoy llorando solo porque el tapón de la botella de lejía no quiere abrirse —le explicó, como en un soliloquio—, sino por la sospecha que eso ha introducido en mí. Al principio, es verdad, pensé que se trataba de un fallo personal. Pensé que era yo, que no podía. Pero no se trata de mí, sino del tapón. Han fabricado un nuevo envase con fallos, han puesto las botellas en las estanterías y las hemos comprado con inocencia. Por culpa de eso se me ha hecho tarde, llegaremos con retraso a la guardería y a mi trabajo. (Peri Rossi,2021, p.28)
El monólogo de Patricia explica la razón de su llanto: impotencia frente a una estructura que está mal de fábrica y que además terminará señalandola como alguien incapaz para responder a las necesidades empresariales que requiere su cargo. Sin embargo, el desmontaje que hace la protagonista, también le permite establecer que no se trata de ella, deja de culparse a sí misma por no poder abrir el tapón, ya que considera que el problema radica en un defecto del producto, el cual fue “diseñado por un ingeniero industrial ávido de éxito, supongo, fuerte, seguro de sí mismo, pero que ha sido un fracaso” (Peri Rossi,2021, p.29). De hecho, el producto tuvo que ser retirado de las estanterías por las incontables quejas de clientes que no han podido abrir las botellas. Lo que la lleva a reconocer la responsabilidad al fabricante, y el diseñador quien aparentemente no está capacitado para ejercer su cargo, pues a pesar de conocer diseño industrial, no entiende las características de su producto ni las formas en que el envase puede facilitar o dificultar su uso.
Esta nueva seguridad sobre su propio accionar frente al error de diseño de un hombre parece liberar a Patricia tanto de la responsabilidad de satisfacer las expectativas de la empresa sobre ella, como de la idea de que existen tareas que no están hechas para las mujeres y por lo tanto irremediablemente requerirá ayuda masculina. Esto se denomina, despatriarcalización, pues de acuerdo con Curiel y Galindo (2015): supone la capacidad de decodificar, desmontar, desmantelar los mandatos y estructuras patriarcales y el reconocimiento de un nuevo punto de partida, que es el hecho de que desde el complejo universo de las mujeres ese proceso de despatriarcalización de facto se está dando. (p.41)
Es por eso que retornó a su casa y “se dirigió directamente a la cocina. Buscó un cuchillo de punta afilada, y, sin titubeos, agujereó el tapón. Lo perforó por el centro con una herida limpia y perfecta. La botella perdió toda su virilidad” (Peri Rossi, 2021, p.29). Esta última oración establece claramente la comparación entre la masculinidad dominante y la botella de lejía que se mantuvo a lo largo del relato y que ha terminado con la liberación de Patricia. Liberación que además se hace tangible cuando la protagonista decide demandar al padre del niño por no hacerse cargo económicamente, en lugar de simplemente tolerarlo.
En última instancia, podemos afirmar que la narrativa propuesta por Peri Rossi, a través de la cotidianeidad de Patricia Suárez, establece la sobreexigencia que tiene la mujer en la sociedad en su rol de madre y trabajadora. La autora también cuestiona la condescendencia con que las figuras masculinas tienden a tratar a las mujeres, como si sus problemas no fuesen reales o estuvieran incapacitadas para solventarlos. Así a través de la botella de lejía, muestra cómo las mujeres se relacionan con problemas producto de errores de fábrica: el sistema patriarcal que por un lado las inválida y por otro les sobre exige para que actúen en la esfera profesional como si la esfera privada no constityera un peso. La obra invita a reflexionar sobre la persistencia de las normativas estructuradas y aboga por la autonomía de las mujeres en la búsqueda de una identidad fuera de los roles predefinidos por la sociedad.
Bibliografía
Bourdieu, P. (1996). La dominación masculina. Revista de Estudios de Género, La Ventana E-ISSN: 2448-7724, (3), 1-95.
Curiel, O. y Galindo, M. (2015). La Descolonización desde una propuesta feminista crítica. En Feminista siempre: Descolonización y despatriarcalización de y desde los feminismos de Abya Yala. (1ª ed.). ACSUR. https://suds.cat/wp-content/uploads/2016/01/Descolonizacion-y-despatriarcalizacion.pdf
Franco Vega, R. (2010). “SITUACIÓN DE LAS MADRES SOLTERAS, VISTO DESDE LA TEORÍA DE ERVING GOFFMAN” [Tesis de licenciatura]. Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo.
Peri Rossi, C. (2000). Desastres íntimos. Penguin Random House Grupo Editorial España. GoogleBooks. (Publicado originalmente en 1997).